¿Qué si sabemos tomar las semillas de chía o de lino? Basta con meterlas en la boca y masticar como el resto de alimentos ¿no?
Pues no.
¿Queréis saber por qué y cómo prepararlas correctamente? Mejor os lo explico en un vídeo:
No voy a hablar sobre sus propiedades puesto que son muchas y estupendamente explicadas en muchas páginas y publicaciones. Eso sí, ahora que ya sabemos preparar las semillas, aquí van unas ideas sobre cómo tomarlas:
– Molidas justo antes de comer, se pueden añadir a ensaladas, cremas, purés o sopas.
– También molidas, se reparten sobre pan con aceite o paté vegetal.
– Dejadas previamente a remojo, se añaden a un batido vegetal sin desechar nada del vaso del remojado.
– También previamente remojadas, se puede hacer un pudding: se dejan remojar en leche o bebida vegetal. Luego se añaden trozos de fruta, frutos secos, avena… Y si se desea endulzar: miel, panela, sirope de ágave… Múltiples opciones como desayuno o merienda.
Lo que también recomiendo es tomarlas, a poder ser, en crudo, sin pasar por cocción de ningún tipo (guisos, horneados…).
Ahora ya podéis tomar las semillas sabiendo que estáis aprovechando sus propiedades.